Un trabajo de pasantía en Suiza.
Screen 360 es un Festival Internacional que se realiza en San Francisco, California, para visualizar películas con temáticas infantiles y dirigidas a los niños. Fue realizado durante unas pasantías en el taller AND de Basilea, Suiza en 2003, donde colaboré con el diseñador Jean Benoit Levy.
Jean Benoit Levi y su taller AND fueron un lugar de gran aprendizaje para mí, en pasantías que hice en Basilea, Suiza en 2003. Durante alrededor de 4 meses aprendí cómo trabaja un diseñador gráfico suizo de alto nivel, y metí mano en la realización de proyectos, de los cuales 2 son para mí memorables: K-cap (diseño de envoltura para CD Rom y sitio web), y Screen 360.
Screen 360 fue el nombre que el cliente (un organizador de festivales de cine de San Francisco) escogió para su nuevo festival de cine, dirigido a los niños. Los bocetos en los que trabajamos con Leviy fueron numerosos (entre 15-25), y el trabajo de depuración fue bastante largo.
Levy acostumbra involucrar a sus pasantes a fondo en sus trabajos y sacarles lo mejor de ellos. Al final el logotipo que resultó convenciendo más a Levy para la marca fue el que se observa en la foto de abajo.
Pensado para la pantalla y motion graphics, el logotipo tiene todos los elementos que pueden hacer alusión al cine de manera muy simplificada: la secuencias de fotogramas.
Puntos de apoyo del proceso del taller suizo AND Trafic Grafic
La simplicidad. Yo quedé bastante asombrado de la cantidad de simplificación que los suizos acostumbran o gustan y que ese haya sido el escogido por el director de arte del taller, Levi. Acostumbrado a la voluptuosidad tropical latina, lo que mejor pude aportar al logo fue color.
El análisis minucioso de los homólogos y su disección según criterios relevantes. El estudio de homólogos fue muy amplio, y organizar los resultados del análisis fue algo muy divertido e interesante gracias al sistema que Levi utiliza.
Las discusiones con el cliente se realizaron casi siempre fuera de horas de oficina (no estuve presente) y por medio de internet (San Francisco), lo cual fue algo que me perdí, pero el profesionalismo del diseñador Levy le daba el espacio que se merecía a su trabajo.
La cultura formal-visual es tan corriente y del día a día que los significados simbólicos de las cosas no se tratan con la relatividad o ligereza que en Latinoamérica, mi medio. Es como si un trazo cualquiera significa algo y todo el mundo lo entiende así, no se pone en tela de duda esa percepción semiótica. Al momento de explicar el logotipo el diseñador no se anda con explicaciones subliminales de lo que un triángulo significa. O lo ves, o eres un analfabeto (visual).
Al final del trabajo me quedó una bitácora que pude guardar como memoria gráfica de mi colaboración, pero encontrar mi colaboración publicada en un libro de una biblioteca universitaria (UTM) a medio mundo de distancia del lugar de origen, y casi 10 años después, fue algo insólito.
Tampoco pude apreciar ninguna de las películas de niños que el festival presentó, lo cual me hubiera gustado mucho. Un agradecimiento tremendo a Jean Benoit Levy por la oportunidad de colaborar en su taller.